Perù

Perú es un país de gran biodiversidad, riqueza cultural y patrimonio natural, sobre todo en los Andes. Sin embargo, esta riqueza está amenazada por la sobreexplotación de los recursos naturales, la contaminación y el cambio climático. El turismo sostenible, que tiene en cuenta las repercusiones medioambientales, económicas y sociales del turismo, ayuda a preservar la biodiversidad y las culturas locales al tiempo que genera ingresos para las comunidades locales. También permite la conservación del medio ambiente, una menor huella de carbono que el turismo tradicional y la promoción de prácticas ecorresponsables. Además, el turismo sostenible fomenta la participación y el empoderamiento de las comunidades locales en la gestión de sus recursos, ofreciéndoles oportunidades de empleo y formación en el sector turístico.

En el marco de este proyecto específico, se prestará especial atención al turismo indígena y al modelo de turismo comunitario. Las comunidades indígenas de Perú suelen estar situadas en zonas naturales especialmente vulnerables a la degradación medioambiental. El turismo indígena desarrollado de forma sostenible representa una oportunidad para que las comunidades promuevan su cultura al tiempo que preservan y mejoran su medio ambiente y sus tesoros naturales. También representa una importante oportunidad económica para las comunidades rurales. Esto se traduce en la creación de pequeñas empresas que apoyan el crecimiento económico y la generación de ingresos que complementan y suplementan su actividad principal, que suele ser la agricultura. Los visitantes pueden comprar productos locales, comer alimentos preparados en el lugar, utilizar servicios ofrecidos y desarrollados por miembros de la comunidad y participar en actividades guiadas, contribuyendo así a estimular la economía local y preservando al mismo tiempo la cultura y las tradiciones locales.

Por último, el turismo autóctono sostenible ayuda a desarrollar la capacidad de los miembros de la comunidad local implicados. De hecho, la población local desempeña un papel activo en la promoción del turismo en su comunidad, fomentando la cooperación, la comunicación y la colaboración entre los miembros de la comunidad. Esto puede contribuir a reforzar los lazos sociales, mejorar la calidad de vida de los residentes locales y reducir el fenómeno del éxodo rural.

De hecho, el sector turístico es un importante motor de crecimiento económico, desarrollo empresarial y creación de empleo, especialmente para las mujeres, los jóvenes y las comunidades locales. Antes de la crisis COVID-19, representaba uno de cada diez puestos de trabajo en todo el mundo y alrededor del 10% del PIB mundial. El sector emplea a una alta proporción de mujeres y jóvenes: en 2019, las mujeres representaban más del 50% de los trabajadores del sector, y la mayoría de todos los trabajadores del turismo tenían menos de 35 años. Sin embargo, el turismo fue una de las industrias más afectadas por la pandemia de COVID-19. El impacto en las empresas, especialmente en las micro, pequeñas y medianas empresas, no tuvo precedentes, y sigue teniendo repercusiones hoy en día. Hoy, cuando llegamos a la fase de recuperación del turismo, esta recuperación debe centrarse en el ser humano, ser inclusiva, sostenible y resiliente. Además, el turismo sostenible puede contribuir a la lucha contra la sobreexplotación de los recursos naturales en los destinos turísticos y a la sostenibilidad de las actividades económicas en las comunidades locales y vecinas (Organización Internacional del Trabajo, 2022), especialmente en un destino con alto potencial turístico como Perú.

Por último, este proyecto, en comparación con otras exploraciones en tierras solidarias, tiene la particularidad de favorecer la inmersión intercultural en una comunidad aborigen de 2 jóvenes procedentes de comunidades aborígenes de Quebec, ofreciéndoles una primera semana completa en una comunidad aborigen con el socio local, lo que permite realizar una serie de talleres para compartir y conocer las respectivas culturas entre los jóvenes voluntarios quebequenses, supervisados por un guía Kina8at, y la comunidad de acogida.

En este contexto, Village Monde ofrece a dos jóvenes de comunidades indígenas locales una experiencia de inmersión única de 3 semanas de duración en apoyo de diversas comunidades rurales de Perú, mediante el desarrollo de un itinerario que les permitirá visitar comunidades indígenas e interactuar con miembros de la comunidad, incluidos jóvenes implicados en el sector del turismo sostenible con los que podrán relacionarse.